Sector público

En Integración 3, Domótica y Sistemas, nos preocupa el desarrollo del entorno inmediato en el que nos desenvolvemos. Por ello, apostamos por llevar la tecnología más allá del edificio, y enlazar cada recurso público en una gran red de nodos interactuando entre sí. Es la mejor forma de poner a disposición de los ciudadanos toda nuestra experiencia para su bienestar.

Internet de las cosas (IoT)

El Internet de las Cosas (IoT en inglés) es la red de dispositivos o «cosas» dotados de software, sensores y conectividad de red, y conectados entre sí para recopilar e intercambiar información. Básicamente se trata de conectar cualquier dispositivo a Internet. IoT permite detectar y controlar objetos de forma remota a través de la infraestructura de red existente, creando oportunidades para una integración más directa entre el mundo físico y los sistemas informáticos, dando como resultado una mayor eficiencia, precisión y beneficio económico.

«Cosas», en el sentido de IoT, puede referirse a una amplia gama de dispositivos como teléfonos inteligentes, auriculares, cafeteras, lavadoras, relojes, implantes de monitoreo cardíaco, transpondedores de biochip en animales de granja, automóviles con sensores incorporados, dispositivos de análisis de ADN para monitoreo ambiental / alimentario / patógeno o dispositivos de operación de campo que ayudan a los bomberos en operaciones de búsqueda y rescate y casi cualquier otra cosa que se pueda imaginar.

La tecnología nos permite integrar tecnologías mucho más extensas, sobrepasando el ámbito del edificio, para cubrir un alcance global.

Smart cities

Una ciudad inteligente es un área urbana donde la tecnología y la recopilación de datos ayudan a mejorar la calidad de vida, así como la sostenibilidad y la eficiencia de las operaciones de la ciudad. Las tecnologías de ciudades inteligentes utilizadas por los gobiernos locales incluyen las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) y el Internet de las cosas (IoT).

Las áreas de operaciones de las ciudades donde las TIC, el IoT y otras tecnologías inteligentes desempeñan un papel cada vez más importante incluyen el transporte, la energía y la infraestructura. A medida que una ciudad actualiza sus sistemas y estructuras para incorporar estas tecnologías, se vuelve más inteligente. En este sentido, parece poco efectivo el despliegue de nuevos servicios e infraestructuras de manera aislada, obviando la posibilidad de coexistencia e interacción con otros sistemas ya existentes.